Querido Simón

16 de Enero 2021,

Querido Simón,

2020

 

Hoy me tome un descanso.

El 2020 me agotó demasiado y quise tener un día para mí, un día donde podía reflexionar aquel año que me causo demasiada tristeza, revivir aquellas memorias que se mantienen al borde del precipicio del recuerdo.

Es increíble que en un año pasarán tantos acontecimientos que nos marcarán para toda la vida, y no solo para mí, si no a nivel mundial. Algunos momentos pudieron ser buenos, pero otros no...

Los cambios que vivimos tuvieron gran impacto en nuestra manera de ver la vida y así mismo de vivirla.

Si alguien me dijera hace 5 años que viviría todas estas aventuras, diría estas realmente loco. 

Pero realmente no extraño a la chica que alguna vez fui, me agrada ver la persona que me eh estado convirtiendo. Eh tenido mis errores, como cualquier persona, pero creo que algo que jamás me arrepentiré será en confiar, confiar en que se vive solo una vez y que si no tomamos aquellas decisiones rápidas que se nos presentan, quizás no vuelvan a pasar.

La vida es de riesgos, a veces no todo se logrará de la manera en la que pensamos, pero, no podemos estar sentados y ver como las demás personas deciden vivirla.

Eso fue algo que me dejo el 2020.

Los domingos ya no volvieron a ser tan aburridos, después de todo.  Recuerdo que aquellos días lo destinaba para la limpieza de mi departamento, me levantaba tarde, lavaba la ropa sucia y salía comprar la despensa. Mi gusto por leer se fue poco a poco, al principio pensaba que era por que no encontraba el libro correcto, pero me doy cuenta de que era porque no era feliz.

El 2021 no es una salvación o un nuevo libro, por que, siendo honestos, no podemos juzgar un año por que pasaron cosas que no esperábamos, no podemos decir que este nuevo año será diferente.

El 2021 es solo otro capitulo más, nosotros tenemos la tarea de sacarle el mejor provecho a ese mismo, cuidándonos y siendo responsables antes las situaciones que estamos pasando. Antes creía que cada año era una nueva oportunidad de reinventarnos, pero ahora se que estaba equivocada, cada día es una oportunidad para reinventarnos.

Saludos.

Elvira Ramos.