Todo comenzó con la invitación... A la nueva boda de mi ex prometido.
Debería haberlo ignorado. Tirado. Prenderla en llamas. Pero no lo hice. Respondí.
Con un invitado.
Y luego mi asistente lo envió accidentalmente.
Hayes Whitley. Mega-estrella de cine. El hombre que ha capturado los corazones de millones. Pero le di el mío hace años. Él fue mi primer amor. Él era mi todo. Justo hasta que él se levanta y va para perseguir sus sueños sin siquiera un simple adiós.
Cuando apareció de la nada diez años después, debería haber sabido alejarme. Debería haber rechazado su oferta de llevarme a la boda de mi ex. Nunca debí haberle dejado besarme.
Pero no lo hice.
Y ahora nos preguntamos si las piezas de la vida que una vez compartimos todavía encajan de alguna manera. Los primeros amores son difíciles de olvidar. La pregunta es, ¿queremos olvidar? ¿O arriesgamos la oportunidad y vemos qué pasa después?
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