16 de Octubre del 2020,
Querido
Simón,
Nuevamente
me eh desaparecido… lo sé, no fue planeado ya que sufrí un accidente de auto.
Realmente
mis padres, los policías, el del seguro, se sorprendieron de que no me hubiera
pasado nada, ya que el accidente, aunque no fue muy grave, fue demasiado peligroso.
Hace dos
semanas de mi accidente, fue un domingo en la tarde, teníamos muchos pedidos a
domicilio y no tenía repartidor. Es por eso por lo que tuve que entregar
algunos pedidos.
Era un día en donde estaba demasiada
estresada, queriendo tirar la toalla, ya que no me había sentido nada bien por
aquellos días (incluso ahora), mi humor estaba por los suelos y con todo lo que
estaba ocurriendo era peor.
Para ser
sincera no recuerdo como paso exactamente, no sé si eso tenga sentido sabes,
los últimos momentos son un poco confusos, solo puedo decirte que lo que me
paso no fue algo normal…
Estaba
mandando un audio a la cajera que tenia en ese momento en el restaurante, pero
recuerdo que quería que me contestara de inmediato ya que quería que me
entregara el siguiente pedido lo más rápido y que me lo entregara en el carro,
para no tenerme que bajar. Revisaba de reojo el celular, mi carro tenia el
porta celular en el centro del mismo, pero no llegaba la respuesta. Yo tenia
parte del pedido y aparte tenia que recoger la otra parte de este, es por eso
por lo que tenía tanta urgencia para llevar todo al mismo tiempo, ya que nos
habíamos equivocado con ese pedido.
De pronto veo el semáforo y la camioneta
blanca a unos metros de mí y decido bajar la velocidad, ahora lo que sigue es
lo mas confuso para mí, no recuerdo si voltee para ver el celular o para ver
que el pedido no manchara el carro. Simplemente sentí el golpe, todo paso
demasiado rápido. En un minuto estaba viendo la camioneta blanca y en el otro
no.
No eh sido
franca con la versión que eh contado a mis padres, al seguro, a la policía, a
ala persona de la camioneta ¿Cómo podría hacerlo? ¿Cómo les explicas que
sentiste que alguien te abrazo para que no te hicieras daño? ¿Cómo les dices
sin quedar como una estúpida?
Pero si, esa
es la verdad de lo que viví y quizás la gente no creerá, pero fue real.
Para mi
carro fue perdida total, dictado por el seguro, ya que las bolsas de aire
explotaron y curiosamente las dos. Otra inconsistencia del accidente, ya que no
iba con ningún pasajero, solo era yo, por lo tanto, no debieron haber explotado
las dos. También toda la parte delantera del carro se dañó, el cofre no cerraba
y el auto automáticamente se protegió en modo choque, es decir se bloqueó.
La camioneta
blanca solo sufrió un pequeño golpe en la carrocería de atrás. La persona que
iba conduciendo afortunadamente no le paso nada.
Mis lesiones
fueron mínimos, prácticamente la bolsa solo me quemo un poco los brazos, el
estomago y tuve moretones en las piernas y en el mismo estómago. Mi labio también fue reventado por el golpe
de la bolsa. Nada grave, lo mínimo para un choque de esa magnitud, es por eso
por lo que todos se quedaron asombrados.
Supongo que
al final del día alguien de arriba me esta cuidando y obviamente se lo
agradezco mucho ya que a veces ni yo misma me puedo cuidar.
Ya que la
persona con la que tenemos contratada el seguro es amigo de mi padre, me
dejaron quedarme con el carro. Para ellos no les servía quedarse con él, ya que
solo la idea de ponerle bolsas de seguridad nuevas les costaban al redor de $50
mil. Afortunadamente lleve el carro a un
taller de un conocido de la familia y nos dio la opción de repáralo.
Pero bueno,
esa es la historia de mi desaparición, digamos que eso no ayudo a sentirme
mejor, pero si me demostró que la vida se puede ir en un momento, yo podría
haberme salido del carro, podría haber tenido una fractura, podría haberme
ahogado con la bolsa, podría haber sido peor… Pero no fue así.
Supongo que
guando te toca, te toca y cuando no , ni aunque te pongas.
Saludos.
Elvira
Ramos.
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