Su nombre es Kellion. Hermoso. Malo. Apuesto. Vivo. Eso es lo que más me atrajo de él, que está tan lleno de vida que me hace sentir que no estoy muerta por dentro.
Pensé que era como los otros moteros de Afxisi, el club de carreras clandestinas más popular y exclusivo de Estados Unidos. Alguien demasiado rico, demasiado hermoso para su propio bien, alguien demasiado lleno de sí mismo para ser humano.
Pero entonces vi un lado secreto de él. Se dio cuenta de que había estado fingiendo todo el tiempo. Me di cuenta de que me necesitaba, y esa parte rota de él me atrajo como una polilla a una llama.
Ahora, quiero ser la que lo haga sonreír. Sonreír de verdad, y no como todas esas sonrisas falsas que usa para enamorar a las chicas que lo rodean.
Quiero hacer que piense en mí, solo en mí. Quiero pertenecerle, solo a él. Pero, sobre todo, quiero que sepa que lo amo. No al motero, ni al hijo del multimillonario, ni al chico sexy. A él. Kellion.
Incluso si su sonrisa me dice que terminará destrozándome, necesito que sepa que no está solo. Soy suya para amar o destruir. Lo que quiera, soy suya.
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