Volumen 3
¿Un verano como compañeros de revolcones? ¿Algo con lo que relajarse? Estaba dentro.
Pero cuando Chloe aparece en la puerta de mi hotel con ganas de arrancarme la cabeza en vez de hacerme una mamada… me preocupo. Mucho. Demasiado, de hecho.
Esto se está convirtiendo en mucho más. Y no puedo hacer nada.
Al igual que la tinta debajo de mi piel, se está volviendo permanente. Duradera. Inamovible.
¿Pero estaba dispuesto a dejarla ir?
De ninguna puta manera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario