Querido Simón,

 19 de Septiembre del 2022, 

Querido Simón, 

¿Alguna vez has tenido una relación? 

Creo que aunque muchos lo puedan dudar, lo fácil es enamorarnos, donde esta lo difícil es en llevar una relación sana. 

Y es que amar a una persona llega de una manera fugaz, sencilla. Empieza por la cercanía que vas teniendo con esa persona, los momentos, las experiencias, los actos desinteresados que van teniendo el  uno con el otro. Claro, el deseo y la pasión es fundamental, impulsa el amor, de pronto una mañana de un domingo te encuentras con algunos amigos y te sientes feliz, pero no completo por que  quisieras que esa persona estuviera contigo y es ahí cuando te das cuenta que ya estas enamorado. 

Queremos creer que ya alcanzamos la meta, queremos pensar que salimos victoriosos por que logramos encontrar una pareja que nos complementa, pero la carrera no termina ahí, ni siquiera ah empezado. 

Nos enfrentamos a muchos retos y situaciones que harán que la relación se ponga a prueba, desde nuestros diferentes personalidades, nuestro trabajo, pensamientos, objetivos de vida, sueños, frustraciones, dinero, familia, hijos, amigos,  podría continuar con la lista pero seria algo interminable. 

Llegaran los momentos difíciles, los momentos donde no podremos aguantarnos, aquellos que no soportaremos ni siquiera respirar el mismo aire, donde nos haremos demasiado daño con las palabras no dichas  y unas de nuestras mejores armas será evitarnos. Nos fastidiara el menor error del otro y las palabras dulces que una vez nos dijimos quedaran en el olvido. 

Los hijos serán el pegamento que nos mantenga en no tomar aquella decisión apresurada que de repente vendrá a nuestra mente, al principio no la diremos en voz alta por que será un golpe duro, pero una vez que las peleas se hagan constante las palabras se nos escaparan de nuestra boca. 

Si tenemos suerte podremos hablar y solucionar los problemas, empatizaremos con el otro y trataremos de hacer aquellos cambios que necesitamos para que esto funcione. Solo será una crisis, se convertirán en recuerdos y aunque quisiéramos que no volviera pasar , sabemos que pasará, pero estaremos hasta el final para poder solucionar las cosas. 

Pero no siempre tenemos suerte, no siempre podremos olvidar las palabras dichas, nuestras cicatrices nos pesaran y se volverá duro seguir. También estará nuestra edad y las responsabilidades que vamos teniendo con el paso de los años, ya no solo con nosotros si no también con nuestros hijos. Aquellos que harán que pospongamos las reconciliaciones, el hablar entre nosotros, por que ya no estamos solos para hacerlo. Así pasaran los años, la palabra "disculpa" quedaran olvidada en nuestra relación, haremos como si nuestra pelea de un día antes no hubiera pasado y continuaremos postergando todo el enojo y el sentimiento. 

Un día los hijos se irán, continuaran con su vida por aparte  y nosotros nos quedaremos nuevamente solos. Pero las viejas heridas no se olvidaran y es ahí cuando nuevamente la palabra divorcio volverá a nuestro pensamiento, ya que fue algo que postergamos. 

¿Valdrá la pena pasar por todo eso?

Y es que el amor no puede ser solo un salvavidas en una relación, hace falta el compromiso por parte de la otra persona, a veces no solo será 50% y 50% , a veces uno tendrá que dar el 100% para que funcione. 

Tu y yo pasaremos de ser todo a nada, solo un recuerdo de lo que una vez fue, nos encontraremos en reuniones familiares y nos saludaremos como dos conocidos nada mas. 

Espero que tengamos suerte y podamos hablar....

Saludos. 

Elvira Ramos.